PAZ y BIENESTAR SOCIAL

Tres claves para una Comunicación Consciente Positiva

El ritmo acelerado en el que vivimos y el estrés a veces nos impiden darnos cuenta cómo nos estamos comunicando con los demás en casa, el trabajo, el centro de estudios o incluso en la calle.  En muchas ocasiones esto nos lleva a un estado de inconsciencia,  que nos hace hablar y actuar en modo automático pudiendo dañar a las personas.

Por ello, es importante poner en práctica la Comunicación Consciente Positiva que nos permite  mejorar nuestras relaciones familiares y sociales.  Nos ayuda a evitar que los pensamientos negativos deriven en emociones, palabras y acciones  negativas, tóxicas y  violentas.

De hecho, vamos a experimentar emociones negativas porque la vida tiene matices, pero es clave que seamos capaces de autocontrolarnos y darnos cuenta qué pensamientos o recuerdos negativos los originan y cómo está afectando nuestra mente, alma y cuerpo. 

Aquí comparto contigo tres pasos básicos que a mí me sirven de mucho para practicar la Comunicación Consciente Positiva que es una maravillosa herramienta capaz de sanar relaciones, unir personas y transformar nuestro presente en paz y ¿por qué no? también en prosperidad, porque cuando nos escuchamos entre todos ¡surgen ideas geniales!

1. Observa y analiza cómo te estás comunicando diariamente en casa, en el trabajo y otros entornos. Pregunta con valentía a los demás cómo ellos perciben tu forma de comunicarte. Y tú también observa si te estás molestando con facilidad. Si sientes que con frecuencia estás estallando, lleva un diario y anota todas aquellas situaciones críticas y pregúntate qué te hizo reaccionar de esa manera. ¿Qué pensé? ¿Qué sentimientos tuve al respecto? ¿Qué dije e hice a los demás cuando estuve temperamental? ¿Qué debí hacer? Identifica la raíz de tus emociones y sentimientos.

2.Medita. Al principio será difícil disipar tu mente y enfocarte en el tiempo presente pero si le pones ganas lo lograrás. Inicia con meditaciones cortas de 5 a 15 minutos. Esta técnica es muy sencilla: Apaga el celular, salvo que tengas que escuchar una audioguía de meditación. Cierra los ojos e inhala profundamente llenando tus pulmones de aire. Al inhalar sonríe y retén el aire manteniendo la sonrisa durante 11 segundos intentado visualizar cada número durante el conteo mental. Luego exhala muy suavemente y vuelve a sonreír e inhalar reteniendo hasta 11. Practícalo a diario para que te acostumbres a equilibrarte respirando cada vez que haya una situación difícil.

3.Escucha al otro enfocándote en la conversación en tiempo presente. Observa si tus pensamientos se van para la luna o las estrellas y vuelve a la Tierra porque  ¡te estás perdiendo de algo muy importante! A mí me pasaba que cuando andaba súper estresada hablaba como una lora sin parar ni escuchar. Pero la meditación me cambió la vida.  Verás que meditando diariamente entrenarás tu mente y gestionarás mejor tus pensamientos y emociones. Podrás conectarte más con el momento presente y comprender mejor a los que más te aman. 

¡Gracias y Bendiciones!

Tu amiga, Guisella Vargas Ochoa, Directora de Conectados Global Media